Una nueva comunidad religiosa ha llegado a la Diócesis de Orihuela-Alicante. Se trata de la rama femenina de Pro Ecclesia Sancta que residirá en el Real Monasterio de la Visitación de Santa María de Orihuela, tradicionalmente conocido como Las Salesas. El obispo diocesano, monseñor Jesús Murgui, les dará la bienvenida este sábado, 6 de enero, fiesta de la Epifanía del Señor, en la Santa Misa que tendrá lugar a las 18:30 h en la iglesia del propio monasterio.
Esta congregación religiosa fue fundada en Perú por el sacerdote jesuita P. Pablo Menor Menor, natural de Villena, en su afán de promover las vocaciones a la vida religiosa y a la santidad. En estos momentos Pro Ecclesia Sancta tiene comunidades en diferentes diócesis de su país de origen, Perú, en Estados Unidos y en Ecuador. A Madrid llega una primera rama masculina en el año 2000. Y ahora la primera comunidad femenina en España se funda en la Diócesis de Orihuela-Alicante con seis hermanas.
Se trata de una comunidad de vida activa cuyo carisma se centra en “vivir y promover la vocación a la santidad fundamentalmente a través de la espiritualidad del Corazón de Jesús”. “Nuestro carisma es muy universal y de “Iglesia en salida” centrándonos sobre todo en las familias, los niños, los jóvenes y los más necesitados e implicándonos en el plan pastoral que se esté llevando a cabo en la Diócesis a través de la formación y del trabajo sacramental” explica la hermana superiora Antonella.
Según les ha pedido el propio obispo diocesano, monseñor Jesús Murgui, van a apoyar la pastoral de la Catedral de Orihuela y del colegio Oratorio Festivo de esta misma ciudad.
En enero de 2013 las Religiosas Salesas dejaron el Monasterio de la Visitación de la ciudad de Orihuela, que habían habitado durante casi dos siglos, debido a la escasez de nuevas vocaciones y al envejecimiento de la comunidad. Con aprobación de la Santa Sede, la comunidad de Orihuela se fusionaba con el Primer Monasterio de la Visitación de Madrid.
Desde entonces ha sido deseo de esta Diócesis, con su obispo D. Jesús a la cabeza, que este monasterio fuera ocupado por otra comunidad religiosa, llevando a cabo durante este tiempo el cuidado y mantenimiento tanto de la iglesia, del Monasterio de la Visitación, como de todos los objetos de culto que posee
Deje su comentario