El Obispado de Orihuela-Alicante y la Universidad Católica de Valencia han suscrito un convenio marco de colaboración, con el fin de poner en marcha acciones conjuntas de formación académica. La firma del acuerdo se llevó a cabo ayer por parte del obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, monseñor Jesús Murgui, y el gran canciller de la Universidad Católica de Valencia y arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares. Al acto asistieron una representación de los colegios diocesanos, así como los obispos eméritos de la citada Diócesis, Rafael Palmero y Victorio Oliver, y el rector de la Universidad Católica, José Manuel Pagán.
Dicho convenio es el punto de partida para ampliar, a través del Instituto Superior de Ciencias Religiosas del Obispado, los campos de formación tanto del profesorado como de todos aquellos agentes que participan en el proceso educativo de niños y jóvenes. Tras el acuerdo, ambas instituciones trabajarán en la elaboración de un máster en Pedagogía Religiosa que se impartirá en su sede con el reconocimiento y acreditación de la Universidad Católica.
El proyecto de colaboración entre ambas instituciones surgió durante el Congreso Diocesano de Educación que se celebró el pasado curso en Orihuela, en los meses de septiembre y febrero. Estas jornadas contaron con la presencia de destacadas figuras de la Santa Sede y la Conferencia Episcopal Española (CEE) en el ámbito educativo, entre ellos: monseñor Angelo Vincenzo Zani, secretario de la Congregación para la Educación Católica en Roma; Alfonso Carrasco Rouco, secretario de la Subcomisión de Universidades de la CEE y obispo de Lugo; así como el propio cardenal Cañizares.
Durante el acto de la firma del acuerdo entre ambas instituciones, el director del Instituto Superior de Ciencias Religiosas, Pedro Luis Vives, en su intervención como ponente, recordó los principios y desafíos educativos que se plantearon a la escuela católica durante el citado congreso, a través de ponencias y experiencias, basadas especialmente en el magisterio del papa Francisco.
Once centros y más de 5.000 escolares
Por su parte, el obispo diocesano, al igual que el cardenal Cañizares, animaron a la comunidad educativa, en este momento de especial dificultad e incertidumbre que afecta también al mundo escolar, a seguir trabajando con esperanza, poniendo en el centro a cada alumno, sabiendo que a pesar de todas las dificultades que se han sumado a la educación a causa de la pandemia, «la escuela católica sigue abriendo sus aulas para continuar educando, acompañando y humanizando cada día la educación». Ambos reconocieron la ardua labor que los docentes están llevando a cabo y les instaron a seguir poniendo el corazón en estos momentos de especial dificultad.
Para finalizar el encuentro, monseñor Jesús Murgui entregó al cardenal Cañizares un ejemplar del nuevo proyecto educativo de los colegios diocesanos que se ha realizado junto al ejemplar de las ponencias del pasado Congreso de Educación. La firma del convenio se enmarcó en el Acto de Apertura de Curso de los Colegios Diocesanos, cuya celebración se adecuó a la actual situación sanitaria. Cabe recordar que la Diócesis de Orihuela- Alicante cuenta con 11 centros de Infantil, Primaria y Secundaria y con más de 5.000 escolares.
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