Un año más, en el marco de las fiestas navideñas, desde el Secretariado de Pastoral Penitenciaria de la Diócesis de Orihuela-Alicante y el CEU Universidad Cardenal Herrera de Elche, se busca de nuevo poner la atención sobre los más de 2.000 presos de las cárceles de la provincia de Alicante sin olvidar las necesidades de sus familias y entorno.
Por lo que, en este contexto, se pone en marcha la campaña “Navidad en el corazón, manantial de vida para la cárcel”. Se apela así a la participación y a la colaboración ciudadana para no olvidar que ayudar a los presos y a sus familias es invertir en prevención del delito, en el freno a la marginalidad y en la igualdad de oportunidades. Y es trabajar también para que los niños que ahora tienen a su padre o familiar en prisión, y que sufren la pobreza, no sean los presos del mañana.
Son muchas las personas de la Diócesis de Orihuela-Alicante, más de 80, las que entregan su tiempo a visitar a los presos y presas de las tres cárceles alicantinas (los centros penitenciarios de Villena y Fontcalent y el psiquiátrico penitenciario), semana tras semana. Pero estas visitas tienen sentido completo cuando es posible pensar en la reinserción de los privados de libertad con los que este equipo de la Pastoral Penitenciaria trabaja. “Intentamos trabajar para que estas historias se conviertan en una vida en libertad plena, sin miedos, sin culpabilidad en los corazones, sin rencores… trabajamos para que su historia de vida siga escribiéndose, esta vez con alguna esperanza de futuro y reinserción y para que las familias, que se quedan fueran, no vivan, de forma paralela, la condena impuesta a algunos de sus miembros” explica al respecto Mariola Ballester, directora del Secretariado Diocesano de Pastoral Penitenciaria.
Historias con rostro
“Ella es una chica extranjera (la llamaré Ana y no diré el país), joven, universitaria, pintora y cristiana, cumple todos los requisitos para ser perseguida en su país, donde la mujer es casi nada, pero un peligro si es universitaria y artista y encima cristiana. Sus cuadros y exposiciones le indujeron a una persecución en la que sintió peligrar su vida. A los 22 años, y sin saber de qué manera ayudarla, su familia decide pagar para conseguir un pasaporte falso y que salga del país. Al llegar a España es detenida por portar documentación falsa y, mal aconsejada por la mafia que le proporcionó el pasaporte, no pide asilo nada más llegar. Después de varios intentos de salir de España, engañada por esta mafia que le proporciona los pasaportes y que cobraba a la familia por cada uno de ellos, acaba siendo detenida de nuevo y esta vez llevada a prisión. Nos encontramos con ella en el módulo de mujeres de Fontcalent, casi no habla español, nos cuesta trabajo entendernos, lleva dos meses allí y vamos a verla porque desde el centro penitenciario nos piden ayuda para que firmemos su acogida en la casa de mujeres que Pastoral Penitenciaria tiene en Alicante y pueda ser clasificada en tercer grado de manera que pueda abandonar el módulo de la prisión y pasar al centro de inserción social y los fines de semana con nosotros en casa. Desde la prisión han pedido su asilo político, voluntarios de Pastoral la hemos acompañado a Madrid a la oficina de asilo y se lo han concedido. Ahora Ana, está en la casa de acogida de la Diócesis de Orihuela-Alicante los fines de semana, podrá estudiar español y trabajar si encuentra un trabajito y en cuanto acabe de cumplir su condena podrá volar a Londres, donde la esperan, porque a su país, con sus padres, de momento no debe volver”.
Mariola Ballester, directora del Secretariado Diocesano de Pastoral Penitenciaria
Los objetivos de la campaña
- Obtener los recursos económicos necesarios para seguir manteniendo abiertas las casas de acogida San Vicente Paúl, para mujeres, y Pedro Arrupe, para hombres, y que permiten hacer de puente entre la vida en la cárcel y la vida en libertad, ayudando así a la reinserción de los presos de la Diócesis de Orihuela-Alicante.
- Becando a las familias de los presos para ayudas de alimentación, comedor escolar para los niños, libros de texto, pago de medicamentos y otras necesidades urgentes.
- Facilitando, a través de ayuda económica, a los internos españoles y extranjeros de las cárceles de Alicante, la comunicación telefónica con la familia, así como el ayudar a sus familias para que puedan visitarlos en la cárcel.
- Mediando, a través de la inserción socio-laboral, para que aquellos que menos opciones tienen, puedan acceder al mercado laboral, y por lo tanto a la construcción de una vida desde los valores del trabajo, el esfuerzo y la responsabilidad social
Con el apoyo del CEU:
El CEU Universidad Cardenal Herrera de Elche es la principal entidad implicada en esta campaña colaborando desde 2002 con el diseño e impresión de dípticos y carteles que sirven para dar a conocer la campaña por todos los rincones de la provincia. Además, el CEU colabora también con la Pastoral Penitenciaria en la maquetación e impresión de los ejemplares de la revista que edita: La Puerta, que sigue siendo un vehículo de comunicación para los presos sirviendo de conexión con el exterior.
¿CÓMO COLABORAR?
- Por Transferencia Bancaria en Sabadell CAM indicando que es “Para Pastoral Penitenciaria”
Cuenta Obispado Orihuela-Alicante:
ES22 0081 7310 6100 0223 8130
- Por Donativo en el Secretariado Diocesano de Pastoral Penitenciaria.
Obispado de Orihuela-Alicante (C/ Marco Oliver, 5, 03009, Alicante)
FOLLETO DE LA CAMPAÑA:
https://archivo.diocesisoa.org/documentos/ficheros/Diptico_Carcel2018_1709.pdf
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