Enmarcado dentro del acto de clausura de la exposición de pintura del artista malagueño Daniel Quintero, que se está llevando a cabo en el Museo Diocesano de Arte Sacro, desde el pasado seis de marzo, el cuarteto de metales MOTET RENAISSANCE QUARTET ofrece un recital el próximo domingo 30 de octubre, a las 13:00 horas, en el patio del propio Museo, Palacio Episcopal de Orihuela.  La entrada será gratuita, hasta completar aforo. Se clausurará de este modo la exposición temporal “Retratos Sefardíes. De la memoria y el presente”, que ha recibido más de 6.000 visitas, concebida como un encuentro judeo-cristiano con el que dar a conocer el mundo judío y sefardí de origen español.

Este cuarteto de metal, cuyos componentes son de Orihuela y de otras poblaciones de la Vega Baja, está integrado por dos trompetas y dos trombones y nace con la intención de recuperar el rico patrimonio histórico-musical de la Catedral de Orihuela.  

El concierto, de unos 45 minutos de duración, trata de conciliar las dos culturas, cristiana y judía, que estuvieron conviviendo durante siglos en la ciudad de Orihuela. En el recital se incluyen piezas sacras y profanas del Renacimiento y música popular judía. El programa de concierto constará de tres bloques.

Una primera parte de música sacra católica que incluye cinco piezas del Archivo Histórico de la Catedral de Orihuela, que hace trescientos años que no se han interpretado en la ciudad de Orihuela, de compositores históricos de la Catedral como Matías Navarro, R. Monserrat o Ginés Pérez. En esta parte también se incluirán dos obras de Tono Rodríguez, compositor, trompetista, profesor del Conservatorio de música de Murcia y director técnico y artístico del cuarteto. Las piezas sacras de la catedral han sido recuperadas y transcritas para metales, por el propio Tono Rodríguez.

En la segunda parte del concierto escucharemos cinco canzonas profanas del renacimiento europeo, de autores como Adriano Banchieri, Paolo Cima o Constanzo Antegnati.

El tercer bloque del concierto estará dedicado a la música popular judía, con la interpretación de la obra “Rapsodia hebraica”, pieza compuesta especialmente para este evento por Tono Rodríguez, en la que aparecen temas populares hebreos.